30 de octubre de 2013

Ruptura no presentará candidatos el 2014

El movimiento RUPTURA, listas 25, no presentará candidatos en ninguna circunscripción electoral para las elecciones seccionales 2014
Aún antes de constituirnos formalmente como Movimiento, quienes emprendimos la tarea de construir, no sólo organización política, sino una aternativa democrática y progresista frente a los problemas estructurales del país, identificamos que muchas de las distorsiones de la política estaban vinculadas al diseño del sistema electoral. Planteamos entonces la necesidad de varias reformas: reglas claras y que no se alteren en cada elección;  prohibición efectiva del uso de recursos públicos con fines electorales; estricto control a los mecanismos de financiamiento de las organizaciones políticas y las campañas electorales;  una autoridad electoral independiente de los movimientos y partidos; el financiamiento igualitario que permita acceder a los medios masivos de comunicación; entre otras.

Muchas de esas aspiraciones se plasmaron en la Constitución de Montecristi y hoy, cinco años después, comprobamos con impotencia que no sólo no son efectivas sino que en algunos casos nos enfrentamos a problemas todavía más serios.

A estas condiciones, o mejor dicho, falta de condiciones institucionales debemos añadir el hecho de que las próximas elecciones son seccionales, es decir elegiremos juntas parroquiales, alcaldes, concejales y prefectos, en un momento en que gran parte de los actores políticos parecen haber decidido hacer abstracción de la política nacional, sumar sus opciones electorales con independencia de sus posturas –o la falta de ellas- frente a los graves asuntos de la política nacional que sin duda los afectan. Si añadimos a esto la práctica del gobierno nacional de condicionar su respaldo a los territorios a la incondicionalidad política de los representantes, surge la pregunta sobre la relevancia de estar en esta elección frente a la opción de concentrar esfuerzos en asuntos nacionales vitales.

En conclusión, con las elecciones convocadas notamos los siguientes vacíos que –a nuestro parecer- confluyen en la idea del partido único y el Estado como partido, que poco a poco va perfeccionándose en el Ecuador:
  • No existen responsables ni conclusiones sobre el penoso episodio de las “firmas” para inscribir organizaciones políticas que tanto daño le hizo al naciente sistema;
  • No hay control sobre el gasto pre electoral del Estado, en sus distintos niveles, ni de las organizaciones políticas;
  • No hay norma en el Código de la Democracia sobre el porcentaje de votación que se requiere de los movimientos nacionales para su permanencia en el padrón;
  • No hay pronunciamiento oficial del Consejo Nacional Electoral sobre la forma en que se calculará el porcentaje de votación obtenido en las elecciones anteriores con el fin de definir “votación nacional en elecciones pluri personales”.
En un escenario de tan alta incertidumbre, consideramos que la participación de organizaciones como la nuestra: sin la fuerza de los recursos económicos privados o públicos sin control, no alcanza a ser más que la legitimación de un lamentable episodio de la vida nacional.  En casos de excepción, algunos de nuestros compañeros y compañeras participarán –con la debida autorización del movimiento- en candidaturas progresistas con las que mantenemos conversaciones y compromisos anteriores.

Esta decisión nuestra no implica que abandonemos ningún otro espacio de disputa democrática de los que existen: seguiremos discutiendo y ofreciendo alternativas frente a los asuntos públicos;  construyendo ciudadanía informada, deliberante, libre; defendiendo los derechos de hombres y mujeres dignas y la necesidad de un Estado democrático y laico; participaremos en la iniciativa impulsada por diversos sectores para llevar a consulta popular la explotación del ITT; activaremos los débiles mecanismos institucionales y jurisdiccionales para estas causas y, por supuesto, seguiremos fortaleciendo nuestras opciones electorales y exigiendo reglas que permitan esta forma de participación política sin las distorsiones que hoy existen y buscan formas de perpetuarse.

21 de agosto de 2013

El Movimiento Ruptura rechaza la decisión de explotar el Yasuní - ITT

El Movimiento Ruptura rechaza la decisión de explotar el Yasuní - ITT

 

Dado que;

 

El Parque Nacional Yasuní es único en el mundo. Sobrevivió a la última glaciación convirtiéndose en uno de los siete refugios del pleistosceno, conservando su flora y fauna por más de doce mil años. 

 

En el Parque Nacional Yasuní viven más de mil trescientas especies animales (596 especies de aves, 268 de peces, 173 de mamíferos, 151 anfibios y 121 de reptiles).

 

En tan sólo una hectárea del Parque Nacional Yasuní existen tantas especies vegetales como en toda América del Norte y habitan más de 100 mil especies de insectos.

 

En la zona habitan pueblos en aislamiento voluntario, cuyo territorio está ya cercado y cuya vida y subsistencia está en peligro.

 

No existe explotación inofensiva. La apertura de pozos, los lodos de explotación, la maquinaria, el ruido, las explosiones, el cemento, los camiones, las tuberías,los helicópteros no son excluyentes a una explotación con buena tecnología o con prácticas empresariales sobresalientes. La explotación a cargo de Petroamazonas no garantiza nada.  

 

Con ponerle fin a la Iniciativa Yasuní-ITT se pierde la oportunidad histórica de darle una marca-país verde al Ecuadory poner a nivel mundial la discusión sobre la sostenibilidad y el cambio en el modelo de desarrollo.

 

No se puede simplificar la discusión en términos de eliminación de pobreza y no es la explotación del Yasuní-ITT lo que sacará al Ecuador de ésta. Es un falso dilema el que afirma que la salud o nutrición de nuestros niños depende de la explotación del Yasuní-ITT.

 

Si se usaron los derechos de la naturaleza como justificación para incluir ciertas preguntas en la anterior consulta popular, la causa del Yasuní-ITT es igual de legítima e importante.

 

El Movimiento Ruptura rechaza la decisión de explotar el Yasuní-ITT y en Asamblea Nacional del Movimiento, realizada el día sábado 17 de agosto en la ciudad de Ambato,resuelve:

 

1)
Exigir la Asamblea Nacional:

 

b)
Respetar los derechos de los pueblos y la naturaleza y convocar a consulta popular antes de una posible autorización de actividades petroleras en el Bloque ITT, la zona más importante del Parque Nacional Yasuní.
c)
Cumplir y hacer cumplir el artículo 57 de la Constitución del Ecuador que prohíbe las actividades extractivas en las zonas en que habitan pueblos en aislamiento voluntario.

 

 

2)
Exigir  a la Corte Constitucional:

 

a)
Asumir su papel de custodia de la Constitución del Ecuador, que claramente describe como delito de etnocidio la violación a los derechos de no explotación de los territorios de los pueblos en aislamiento voluntario. Los territorios del Bloque ITT, como lo afirma el artículo 57 de la Constitución, son “de posesión ancestral irreductible e intangible, y en ellos estará vedada todo tipo de actividad extractiva.”

 

3)
Demandar al Gobierno Nacional:

 

a)
Mantener sus ofertas electorales y respetar la planificación nacional, reflejada en el Plan del Buen Vivir, según el cual el gobierno conduciría al Ecuador a un cambio de matriz productiva y económica, reemplazando el modelo de dependencia petrolera y depredación ambiental.
b)
Propiciar el derecho ciudadano de pronunciarse en las urnas, en una Consulta Popular, para aprobar o no la explotación del Parque Nacional Yasuní-ITT.
c)
Analizar otras medidas presupuestarias que permitan atender las necesidades básicas de los ecuatorianos sin poner en riesgoso territorio más biodiverso del planeta y fuente de recursos no petroleros para el Ecuador.

 

4)
Como movimiento político:

 

a)
Participaremos de los esfuerzos que sectores organizados y ciudadanos realicen para el llamado a consulta popular sobre el tema.
b)
Invitamos a nuestros militantes y simpatizantes al debate, la movilización y la acción; abandonar la iniciativa Yasuní-ITT es renunciar a la idea de un modelo de vida y de desarrollo con mayor justicia y equilibrio, no estamos dispuestos a hacerlo.